Azulejos 2

Curioso azulejo que da nombre a la casa que hace esquina entre las calles Río de la Plata y Montevideo. Es difícil verlo porque no es una casa especialmente llamativa y los árboles tapan mucho la fachada. Siempre me gustó por lo singular del tipo de letra, los tamaños cambiantes,... Y el nombre de la casa, que lo dice todo.

Despidiendo a las carretas

Dice una sevillana "Se me va, el alma tras las carretas se me va, se me va, se me va..."

Un año más he despedido al Simpecado de mi Hermandad de Triana camino del Rocío, un año más me quedo aquí imaginando caminos, con los recuerdos de los que me enseñaron a quererla.

Por tratarse de este blog tengo un recuerdo para mi recordado y querido Manolo Palomar, vecino de El Porvenir y rociero de Triana, cuya familia preparó durante años su carreta en el jardín de la Parroquia.

Una de las casas más bellas

Se llama Villa Adelaida, está al principio de la calle Brasil justo en el arranque de Santa Rosa, siempre me pareció una de las casas más bellas del barrio. Su arquitectura es impresionante y la cerámica que aparece en el edificio y el jardín no lo es menos. Yo la recuerdo durante muchísimos años, hasta hace poco, como residencia de los hermanos maristas. Merece la pena darse una vuelta por allí solo por verla.

Procesión de impedidos

Aunque ahora la llamen Procesión Eucarística, para nosotros siempre será la Procesión de impedidos. Recuerdo las mañanas de mayo en la que bien temprano me despertaban los tambores y la música de la Banda de Soria, mi padre me llevaba a ver pasar desde el balcón de casa el palio con Don Antonio portando el Santísimo. Junto a él, en el cortejo recuerdo a aquellos que ningún año faltaban a la cita, D.José Monje y D.Manuel Gómez Rojas, profesores de mi colegio, Los hermanos Antonio y Tomás Barrón, Carmelo dando sus camballadas portando el antiguo Guión Sacramental. Después, cuando comencé a participar en ella, supe que con los faroles de mano nunca faltaban Eduardo Garzón y Joaquín Gutierrez, que con un cirio nunca falta Pepe García, ni Luis Lerdo en el palio. Son personas que siempre han dado sentido y alma a nuestro barrio, en la Parroquia y fuera de ella, y con cuya amistad me honro.

El próximo domingo los tambores no me despertarán, pero resonarán en mi mente con los recuerdos.

La Virgen del Prado

Mañana 13 de mayo, se celebra la función en honor de la Virgen del Prado, imagen que preside el altar mayor de la Parroquia de San Sebatián.

De autor desconocido, está atribuida fundamentalmente a Jerónimo Hernández, aunque también hay quien la atribuye a Juan Bautista Vázquez "El Viejo". Datada entre 1577 y 1578, presenta a la Virgen y con el Niño en uno de sus brazos, mientras en la otra mano sostiene una pera, por lo que también se le conocía popularmente como la Virgen de la Pera. Es una imagen de calidad artística suficiente como para ser considerada un buen ejemplo de la escultura manierista de finales del siglo XVI en Sevilla.

Hace años llegó a salir en procesión por el barrio. Contaba Manolo Robles, hermano fundador de nuestra Hermandad, que el último año que salió lo hizo con una pera natural en su mano, en una de las "levantás" del paso la pera salió por los aires y a un crío le faltó tiempo para llevársela a la boca, y es que eran años como para no pensarse mucho ciertas cosas.

A lo mejor la volvemos a ver algún día de nuevo por las calles de El Porvenir...

Azulejos 1

No todo va a ser de lo mismo, que aunque históricamente hayamos sido un barrio aislado tampoco somos tan cerrados. Algún día trataré mi teoría sobre las "genealogías" de la Hermandad. Hoy aprovechamos para abrir una serie sobre azulejos y retablos que hay en El Porvenir. No es que haya muchos, pero algunos son muy interesantes.

Este primero está en una casa de la calle Montevideo, es un magnífico retablo del Señor de Pasión, aunque al estar en un costado no se ve especialmente bien en la foto, en cualquier caso creo que se podeis hacer una idea de su calidad.

Por cierto, trataré de hacer otra foto con menos cables.