sábado, marzo 23, 2013

Domingo de Ramos. El Porvenir


Una luz. Las capas. Antifaces blancos. Las calles. Sus calles. Pisadas que pisan pisadas. Sol buscando blancos y plata. Río de Plata. Una ilusión común. Una mirada. Una puerta que se abre. Una luz que ciega. Una cruz que se alza. Un tambor que rompe. La vida que surge. El Parque. Mi Parque. Su Parque. La ciudad. Otra vez el Parque. Nuestro Parque. El barrio. Su barrio. El lugar donde habita mi historia. Mi infancia. Mi juventud. Mi vida. Vuelta al vientre eterno. Una puerta que se cierra.
La vida no son siete días. La vida entera cabe en doce horas. Doce horas de un Domingo de Ramos.

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